Revisando nuestro blog hemos tomado consciencia de la multitud de ocasiones en que la palabra Ferrari aparece, lógico esta es una bitácora sobre la historia del motor, pero curiosamente sólo en una ocasión nos hemos adentrado en la historia de Enzo Ferrari y nunca hemos hablado sobre sus museos con el detalle y la atención que se merecen. Pues bien, hoy tampoco lo vamos a hacer.
Cine y motor, esa mezcla maravillosa que unida a una marca como Ferrari resulta fascinante. Una exposición en el Museo Enzo Ferrai da cuenta de ello
No es por desprecio, todo lo contrario, nuestra intención es dedicarle una mirada cuidadosa y atenta, una atención exclusiva que, dado el tema que tocamos hoy, no se la podremos dar. Porque hoy queremos hablar de una exposición dedicada a la poderosa química que siempre ha existido entre el cine y el automóvil, aunque en este caso debemos sustituir la palabra «automóvil» por Ferrari y prestar atención.
Dos son los museos que portan la palabra Ferrari en sus fachadas, uno en Módena dedicado a Il Commendatore, Enzo Ferrari. Y a 18 Km. de distancia, en Maranello, el museo Ferrari. La que hoy nos ocupa es una exposición presentada en el MEF, el Museo Enzo Ferrari, y quiere adentrarse en la presencia que han tenido los vehículos de la marca en la Gran Pantalla.
Dentro y fuera de la pantalla Ferrari siempre ha sido un imán para los actores.
En la muestra tratan de unir los modelos de Ferrari con las imágenes de las películas o series en las que aparecen, recordemos la Serie Magnum P.I., con Tom Selleck al volante de un magnífico 308 GTS, o el Testarossa blanco de Miami Vice, o el 512S usado en la película Le Mans de 1971 y ya puestos recordemos a la magnífica Sofía Loren y su 375 América en «La estatua desnuda» de 1957.
Y fuera de la pantalla, los famosos Ferrari de Paul Newman, con el que llegó a competir en Daytona, o las bellas vistas de que disfrutaba Steve McQueen cuando echaba un vistazo a su colección de Ferraris. Por no mencionar a Marilyn Monroe, Peter Sellers, Nicolas Cage y un sin fin de actores y actrices enamorados de la marca del Cavallino Rampante.
Enamorados del séptimo arte y del motor nos podemos quedar algo bizcos al querer disfrutar de este placer para nuestros sentidos. Visitar el museo ubicado en esta región italiana, poblada de infinidad de tentaciones para nosotros locos los humos y aceites de motor, que además ameniza nuestros ratos libres con esa cocina que tanto nos agrada. Dedicaremos, como decíamos al principio, otro momento para detallar lo que podremos disfrutar en una futura visita a tan magnífica zona.
Para nosotros la estrella es su coche clásico, consúltenos y se sorprenderá.