Hablábamos hace unas semanas de la evolución del Mercado de Coches Clásicos, de aquellos modelos que aún tienen perspectivas de seguir incrementando su precio. Son modelos que pueden ser considerados como medio de inversión, a parte de ser bellas piezas para nuestra colección de clásicos. Este del que hoy queremos hablar formó parte del catálogo de un fabricante inglés que, a pesar de no ser muy conocido por nuestras tierras, goza de una imagen de calidad importante comparable a Lotus o Jaguar.
Interesante y poco conocido modelo a tener en cuenta
TVR nace en de la mano de Trevor Wilkinson en 1947 con el nombre de Trevcar Motors (las letras que aparecen en la marca parten claramente del nombre del fundador). En 1949 presenta su primer coche el TVR One, un biplaza con carrocería de aluminio y tracción trasera definiría la línea que seguirían todos los modelos que la empresa ha fabricado.
Tras veinte años al frente de la empresa Wilkinson la vende a los Lilley, padre e hijo, en 1965 y empieza un período de altibajos, de cambio de propietarios y sucesivos renacimientos que sin embargo no se ven reflejados en los modelos que la empresa ofrece.
En 1981 Peter Wheeler se hace cargo de la compañía y empieza una época dorada en la que consigue las mejores cifras de venta, y los coches mejor equilibrados de toda la historia de la marca. Es en este período cuando se empieza a producir el Chimaera (el nombre hace referencia a la Quimera de la mitología griega, que estaba compuesto de partes de distintos animales).
Divertido, cómodo y buena inversión, el coche perfecto
El TVR Chimaera es un coche que está en producción entre los años 1992 y 2003, usa el mismo chasis que su hermano el Griffith usando el mismo motor derivado de un Rover V8. Dentro de los cánones de la marca el Chimaera trata de ser el más «civilizado» de entre sus hermanos. Un cabriolet cómodo, adecuado para largos trayectos y por eso es de unas dimensiones superiores a sus antecesores, más largo, espacioso y con una suspensión más suave que los demás. Se entrega siempre con motores V8 pero de distintos cubicajes que van desde los 4 a los 5 litros.
El Chimaera es uno de los coches más atractivos y divertidos de los que podemos encontrar entre las listas de «coches aún asequibles», aunque no imaginemos que su precio es como el del Peugeot 205 GTI que hace unas semanas comentábamos por estos lares. Es difícil encontrar unidades por debajo de los 15.000€ (aunque hemos visto algunos anuncios con precios más bajos… el estado del vehículo no parecía demasiado bueno) siendo los precios más normales a partir de los 30.000€. A pesar de ello las perspectivas del mercado indican que va a ser un coche muy cotizado en el futuro, y por eso avisan los expertos de que es el momento de adquirirlos.
Además TVR, que tras el período en que fue dirigida por Wheeler pasó a manos de un empresario ruso, en 2004, que gracias a su nefasta gestión consiguió hundir de forma casi definitiva la marca, parece que va a ser reflotada. Un grupo de empresarios, con unas intenciones y métodos algo más sensatos que los del magnate del este llevan dando soporte a los propietarios con piezas de repuesto desde el año 2014 y prometieron un modelo nuevo para el año 2015 (aunque parece que van algo retrasados con el proyecto y pretenden presentarlo este año, esperemos que haya suerte).