Encontrar un coche que después de 24 años esté como el día que salió de fábrica es bastante extraño, que además sea uno de los coches más deseados, y caros, del mercado lo hace aún más especial. Solo fueron construidas 51 unidades de este modelo, además esta es una de las dos únicas que se entregaron con el habitáculo completamente acabado, como si de un coche de serie se tratara. Hay que tener en cuenta que este modelo es una versión más liviana y potente del 911 Carrera 3.8 RS. Creados para la competición GT, no podían ser matriculados.
Parece el argumento de un mal vendedor, en este caso es totalmente cierto
Se describe el coche como un modelo único y a estrenar. Estamos hartos de escuchar esta misma frase para cada ocasión en que tratan de vendernos algo, puede sonar como una cantinela gastada, depende de nuestro nivel de inocencia el que nos la creamos o no. Sin embargo, en este caso, el argumento que utiliza el vendedor es indiscutible: el coche está nuevo.
Como suele ocurrir, cada vez con más frecuencia, hemos tenido conocimiento de este supercoche a través de la información facilitada por la casa de subastas Rm Sotheby´s. El vehículo en cuestión va a ser puesto a la venta el próximo 27 de Mayo en la subasta que tendrá lugar durante la celebración del Concurso de Elegancia de Villa de´Este, cerca de la ciudad romana de Tívoli, en Italia.
Nuevo y espectacular
El coche clásico en cuestión sólo ha recorrido 10 Km desde que salió de fábrica, nunca ha sido usado y se encuentra en el mismo estado en que estaba cuando la fábrica lo entregó. Tan es así que la capa de Cosmoline (capa de grasa protectora contra corrosión y arañazos) que lo cubría a la salida de la factoría aún sigue ahí, por eso esas manchas de polvo y suciedad acumulados sobre la misma. El coche bajo esta gruesa capa protectora se encuentra en perfecto estado de revista.
Acabado en Plata Polar Silver su interior está rematado en color rojo Can Can Red (¿?) tal como informa la página oficial de la subasta. El 3.8 RSR da 324 CV al ser la versión de competición del 3.8 RS, usando el mismo motor M64 de 3.8 litros con una mejora en pistones y sistema de alimentación. El coche además está aligerado con un «adelgazamiento» general que rebajaba su peso por debajo de los 1.200 Kg. Consiguiendo de esta forma acelerar de 0 a 100 Km/h en unos 3.7 segundos.
Lo más curioso de todo, y que aún nadie ha desvelado, es la razón por la que, tras hacer un pedido tan especial y caro a la fábrica Porsche el comprador decide guardarlo en un almacén durante casi un cuarto de siglo. Cualquier persona «normal» sabiendo que tiene una máquina como esa al otro lado de la puerta hubiera «pecado» en alguna ocasión con ella. Máxime si el tiempo en que tenemos que sujetar nuestros instintos tan sumamente largo… Inexplicable, o no tanto, si la mente detrás de esta estrategia es un inversor frío, calculador y con gran visión de futuro.
Dicho todo esto ahora viene lo más interesante para nosotros, aficionados, el coche puede que alcance un precio de venta al rededor de los 2 millones de Euros, ahí es nada. Ya estamos rebuscando entre nuestras huchas, bajo las baldosas y dentro del colchón. Atentos, la competencia será dura…