Van a ser expuestas a partir del 14 de Abril en este museo americano, un lugar que merece la pena visitar aunque solo sea para contemplarlo desde fuera. Somos conscientes de la distancia, pero no por eso deja de llamarnos la atención la imaginación de la que los responsables de este museo hacen gala en todas y cada una de sus propuestas, empezando por el edificio que los acoge. Hemos hablado hace tiempo de este lugar, y de alguna de sus exhibiciones, hoy hacemos referencia a la próxima y muy llamativa propuesta, Custom Revolution, que viene a reconocer la labor de esos atrevidos creadores, iconoclastas dispuestos a romper cualquier canon y hacer brillar su imaginación con diseños fascinantes.
Raras, únicas y bellísimas motocicletas
Hasta no hace muchos años cuando hablábamos de las «Custom» siempre nos imaginábamos esas motos con largas horquillas en las ruedas delanteras y depósito de lágrima, pero hace tiempo que la palabra «custom» (que en inglés quiere decir -hacer- a medida) que se ha castellanizado con la expresión «customizar» equivalente a personalizar, ha dejado de asociarse a un tipo concreto de moto. La palabra se usa para hablar de la adaptación del diseño de un coche o una moto a los gustos de su propietario.
Las custom una moda al alza
En lo que hace referencia a las motocicletas ya empezamos a ver por las calles de nuestras ciudades algunos ejemplos de motos personalizadas al nivel de lo que se va a presentar en la exposición del Petersen Museum de Los Ángeles, vehículos que han sido pintados con esmero, donde la óptica ha sido sustituida y depósito, asiento e incluso ruedas o retrovisores han sido modificados. No son muchos aún los ejemplos pero sí muy llamativos hay, lógicamente, tantas variedades como gusto tenga el propietario, pero en la mayoría de los casos la imagen es realmente atractiva.
Haciendo un pequeño inciso, recordamos ahora los intentos por convertir nuestra Derbi Diablo en una 74cc cambiando el cilindro y carburador (¿un Dellorto 18 mm?) y dejando el escape tan solo un poco libre, aquello sí que era customizar. Gracias a Dios no existía la ITV pues nos hubieran inmovilizado la moto y a nosotros mismos, hablo de los 70 u 80 del siglo pasado. Tiempos de experimentación y aprendizaje que nos abrieron los ojos a más de uno a este maravilloso mundo del motor.
Las custom de las que hablamos aquí son algo más serio, incluso hace un par de años nos referíamos a El Solitario, un español que se encuentra entre las élites mundiales de este tipo de creaciones. Son trabajos esmerados y cuidadosos donde el resultado final es una verdadera obra de arte, motos con aspecto retro pero con mecánicas y recursos actuales. La opción de visitar el Petersen sigue siendo complicada, pero estar atentos a su web y contemplar algunas de las bellezas expuestas siempre es una opción disponible. Para nosotros pobres viajeros de sofá es la mejor alternativa, sumada a nuestra constante búsqueda de nuevas experiencias (visuales al menos) relacionadas con el motor clásico.
Nuestros seguros sí que están customizados para el aficionado de las motos clásicas. Consúltanos!!