Volvemos a hablar de lo más cercano, aquello que llevamos entre nuestras manos y nos ayuda a sentir la fuerza, la vibración y la marcha, y no es en sentido figurado, de nuestro vehículo. Es el timón con el que indicamos la dirección en que se desplaza nuestro coche, de tan obvio parece lógico que sea así. Pero tuvo que ser inventado, desarrollado, en sus comienzos los vehículos automóviles, que ahora llamamos coches, tenían sistemas de dirección peculiares.
Habituados a su uso pensamos que el volante siempre ha estado ahí, no obstante tiene una historia origen particular
La primera referencia a un volante con forma similar a los actuales se remonta a 1894 cuando Alfred Vacheron participó en la carrera París-Rouen con un Panhard de 4Hp al que había adaptado una rueda circular para manejarlo en lugar del habitual timón, similar al de los barcos a vela.
La realidad es que los sistemas de conducción usados hasta ese momento eran adaptaciones hechas de los sistemas de control usados en otros medios de transporte, como las cañas de timones de los barcos, así se ve en la foto de un modelo de Panhard que aparece en nuestra portada, también se usaban manivelas con un agarre para facilitar su uso en los giros.
Pero la innovación hecha por Vacherón aún tardaría algunos años e popularizarse, en 1898 los Panhard traían de serie el volante, no sería hasta 1902 que el fabricante americano Rambler, el único de los que fabricaban de forma masiva en aquellos tiempos lo incorpora a todos sus modelos.
Siendo el mismo concepto, su evolución ha sido considerable durante el siglo XX
No es hasta los años veinte del siglo pasado que empieza a evolucionar el diseño de esta pieza, imprescindible ya en cualquier coche de aquellos años. Y es que los conductores de camión a veces tenían serias dificultades para ocupar su lugar en el asiento del conductor por el tamaño del volante que tenían que mover. Empieza el desarrollo de la dirección asistida por parte de Francis W. Davis. Aunque es en los años 60 cuando se plantea usar el volante para algo más que manejar la dirección del vehículo y alojar la bocina. Se empiezan a ubicar botones y controles relacionados con la iluminación o los limpiaparabrisas. El verdadero salto hacia adelante se produce en los años 90 que es cuando empiezan a implementarse todos los controles y desarrollos que ya en nuestros días podemos disfrutar.
A lo largo de todo el siglo pasado el cambio en este componente fundamental del automóvil ha sido constante y no sólo en algo tan obvio como los materiales usados, número de radios o tamaño sino en su ergonomía y la seguridad del conductor, pero éste será tema para otra entrada.
Aseguramos su coche clásico, déjenos dirigir su seguridad!!