Parece que los responsables de la fábrica francesa han decidido «aclarar» sus archivos históricos, más de 400 coches conforman la herencia que Citroën conserva en sus antiguas instalaciones de Aulnay-sous-Bois.
Prototipos y piezas únicas de la marca van a ser subastadas online el 10 de Diciembre
Decididamente un nuevo futuro espera a los componentes de su stock de históricos pues todos los coches almacenados van a emprender nuevos caminos, unos serán expuestos en 2018 durante la celebración del primer centenario de la marca, otros serán enviados al museo «L´Aventure Peugeot Citroën DS» en Borgoña. Mientras que los restantes 65 son los que motivan esta entrada, pues pasarán bajo el martillo de la casa de subastas Leclere en un evento online que durará 24 horas, empezando a las 14.00 del próximo domingo 10 de Diciembre.
Una de esas ocasiones que se presenta pocas veces en nuestras vidas
No siempre tiene uno al alcance de los dedos (valga la imagen, nunca, creemos, más acertada) una colección de vehículos realmente originales y no sólo, pues el catálogo que presenta la casa de subastas es mucho más amplio ofreciendo también múltiples, y algunos bastante curiosos, objetos de colección relacionados con la marca.
Volviendo a lo nuestro, los coches, podremos encontrar entre los lotes ofrecidos desde coches anteriores a la Gran Guerra hasta prototipos, pre-clásicos y algunos vapuleados iconos de Citroën como el Traction Avant o un Meari 4×4 que parece hecho con piezas de distintos unidades o, tal vez, sea algún vehículo de pruebas. La realidad es que no son precios descabellados los valores de partida van desde los 1.000€ a los 30.000€.
Si dedicamos algo de tiempo a recorrer, y disfrutar, las casi 190 páginas del catálogo podemos encontrarnos varios vehículos con matrículas españolas, otros parecen sacados de la cadena de montaje antes de tiempo, están a medio acabar, e incluso hemos llegado a ver un prototipo de furgoneta futurista denominada Tubik, varios son los vehículos de los años 20 y 30, que presentan un estado de deterioro lamentable e ilógico si tenemos en cuenta que estamos viendo vehículos almacenados por su propio creador del que se podría esperar un poco más de cariño hacia ellos.
Definitivamente es un buen entretenimiento para todos aquellos aficionados curiosos, si además nos atrevemos a participar en la subasta tal vez lleguemos a ser orgullosos propietarios de un trozo de la historia de Citroën, quién sabe.
Aseguramos coches clásicos, disfrutamos de su historia!
